Seguimos la serie de entradas sobre la Reserva Nacional del Masái Mara. En esta entrada el protagonista será otro el otro de los grandes felinos de la Sabana: El Guepardo.

El guepardo o chita (Acinonyx jubatus) es un miembro atípico de la familia de los félidos. Es el único representante vivo del género Acinonyx. Caza gracias a su vista y a su gran velocidad. Es el animal terrestre más veloz. Alcanza una velocidad punta de 115 km/h en carreras de hasta cuatrocientos o quinientos metros.

Mide entre 110 y 150 cm de longitud, a lo cual hay que añadir una cola de entre 55 a 80 cm. Su altura a la cruz es de 74 a 90 cm y pesa entre 35 y 60 kg: los machos son ligeramente mayor que las hembras.

El guepardo posee una anatomía especializada para la carrera. Posee el mayor corazón en proporción a su tamaño de todos los felinos, lo que le permite bombear la sangre con más fuerza hacia todo su cuerpo. Sus pulmones y fosas nasales son muy amplios para absorber más oxígeno; además, posee una larga cola, que puede alcanzar la mitad de la longitud de su cuerpo, lo cual le da estabilidad en la persecución.(1)

Suele cazar gacelas e impalas, aunque también atrapa crías de otros mamíferos, especialmente de ñu y cebra.
